Está dedicado a esta amante ideal que puede ser nuestra ciudad con sus gozos y sus sombras y a la que le perdonamos casi todo aunque a veces nos cueste, sea ella culpable o no.
martes, 24 de enero de 2012
CHAPUZAS BARCELONENSIS
En Barcelona que un edificio sea medieval, modernista o de rabiosa vanguardia carece de importancia, la desidia municipal hará la vista gorda ante las chapuzas, mientras se les llenará la boca de cultureta.
No me cansaré de sacar a la luz atropellos como este que son un insulto a la razón y al buen gusto. ¿Señores munícipes, no se les cae la cara de vergüenza tolerando tamaños desaguisados de cables?
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