HOMENAJE DOBLE EN PLAZA REAL

Recibo del Café Ocaña de la plaza Real la invitación del homenaje que se prepara, es el 3º  y veo que Nazario ha colocado una figura de 3 metros y medio que su amigo Alejandro Molina construyó 

La plaza Real es un mosaico de lo mas variopinto y de visita obligada a todo el que pasa por Barcelona, un ejemplo de la sociedad de la ciudad

este año la novedad es que la figura "Miss Ocaña" vuelve a la plaza con todo su esplendor, como antaño brilló

Ocaña hizo vibrar la plaza en sus apariciones públicas hasta tal punto que la hizo suya

Y el Ai-huntamiento de Barcelona lo entendió a su pesar. Por eso celebró cada año durante las fiestas de la Mercé un homenaje al pintor después de su muerte

La fiesta comenzaba desde el primer instante de la bajada por el balcón de "Miss Ocaña" a la plaza, podemos ver hasta las cuerdas empleadas y los bancos alargados de cuando los vecinos parloteaban sin parar.

Nazario Luque y Alejandro Molina formaban una pareja de artistas muy productiva entre comics, escultura, pintura......

aquí podemos ver tres secuencias del proceso de la creación de la giganta

La Miss mantiene el espíritu de Ocaña en toda su esencia

aquí podemos verle con la María de las Ramblas, con peineta, of course !!

o al mismísimo Ocaña con abanico, mantilla y peineta vestido para la ocasión, parece un cuadro de Casas en los palcos del Liceo 

La "Miss Ocaña" encontró casa en el bar Raval del barrio chino durante muchos años

pero llegó el cierre y la giganta tuvo que buscarse otra casa para colocarse

muchos fueron los grafitis, y rasguños que sufrió , pero había sobrevivido casi 30 años, a pesar de estar construida con cartón y alambres pintados

por este motivo al hacerse cargo el Bar Ocaña de la plaza Real, mandó que se restaurase para dejarla como el primer día, y esta tarea la llevó a cabo Samuel Mestre

Y cuando todo estuvo preparado, el Café Bar Ocaña decidió celebrarlo

y lo hizo a lo grande como siempre, a cargo de Abel Barranco y Manuel Julian Parralo

Hecha la presentación en sociedad se elevó a los altares, perdón a los balcones

Mientras Carla y Andrea se dedicaban a construir el marco vegetal que arroparía a la giganta

Nazario fue siguiendo celosamente todos los pasos y sacando fotos para inmortalizarlo

Y cuando todo estuvo en su sitio: Las azafatas procedieron

para anunciar que la banda de músicos recién llegada de Cantillana estaba a punto de actuar

Y la música empezó a sonar......y los cielos se cubrieron de algodones ocañescos

convirtiéndose toda  la plaza en un inmenso auditorio que con sus acordes llamaban a los ciudadanos a participar en el evento

Y vaya si acudieron, fue todo un éxito de participación como podéis ver, no faltó nadie

Cuando llegó la noche la plaza parecía venirse abajo

y Abel lució como nunca

mientras los pasodobles volvían locos a los asistentes

 la fachada misma del local parecía que se transubstanciase, en materias volátiles, etéreas, irreales....

fue el momento que los cañones de confeti estallaron entre los Ohhhhh del público entregado

Entonces hizo su aparición La Fernanda, cargada de medallas de su Pastora Divina de Cantillana y los cañones de luces como si se tratase del Palacio Nazional de Montjuich

Así pues hechos los honores....comenzó el baile....

Dentro del local los mariachis no paraban de tocar, la alegría era inaudita, se mascaba en el aire un tiempo que ya no está

y afuera en la plaza no cabía nadie mas, estaba "abarrotá"

Muchos fueron los artistas invitados, gente de la cultura , actores y periodistas, nadie quería faltar....

Allí se encontraban todos y cada uno que en esta ciudad son en artes varias como podéis observar

Una noche mágica...

Un artista muy querido y recordado en la Barcelona no-oficial

Desde aquí felicito al Bar Ocaña y a su dueña Joaquima Laguna por este derroche de artes sin igual en la ciudad de Barcelona

Y agradecer a Nazario por su colaboración indispensable, su testimonio y su amor por Alejandro y su amigo Ocaña.

Por la mañana me pasé por la plaza y a pesar de las mangueras y barrido de los servicios de limpieza aun quedaban rastros del desenfreno crepuscular

El Sol comenzaba a iluminar la plaza....y noté que Ocaña me miraba desde el balcón.